Re: La playa

**Alastair Duncan** Vie Mayo 27, 2011 9:31 am

Se sienta en la arena él también, pero dejando metros de distancia entre él y la chica, no sea que le den ganas de arrearla con la cámara en la cabeza. Además, había que aclarar unos cuantos puntos.

- Permíteme que discrepe - mira que culto habla cuando quiere - A) Más quisieras tu B) De eso no me faltan ganas, que no te quepa duda. Y el dinero de tu hucha como que no me interesa, por hoy ya voy servido - a todo esto, es incomodísimo lo de estar sentado en la arena, se está poniendo perdido. Suena un teléfono, pero la niña decide que es mejor no contestar - A ver si adivino, mamá está preocupada porque su hija anda fuera de la cama a estas horas - oye, le está tocando demasiado las narices con lo de meterse con su imagen - ¿Novia? ¿Cuál de todas? - es que él no gasta de eso.

**Erin A. Raskolnikova** Vie Mayo 27, 2011 9:40 am

- Te permito que discrepes, descuida, no por ello me voy a poner de acuerdo contigo -volvió a encogerse de hombros, un gesto muy recurrente en ella. Asimismo, volvió a actuar con normalidad aunque él acabase de admitir que tenía ganas de darle una paliza- Bueno, da lo mismo, sigues teniendo cara de eso -que era lo que ella quería aclarar. Visto que él se sentaba lejos, fue ella la que gateó para acercarse un poco y sentarse frente a él. Más que nada porque su cámara era buena, pero su flash no era infinito- Papá, seguro que estará encantado de saber que estoy aquí, leeeejos de casa, y con un tío chungo -pero bueno, a ella le daba lo mismo. Levantó la cámara ahora que estaba lo suficiente cerca- A ver, demuestra que sabes sonreír y que no tienes un... bueno, un eso metido por ahí -un palo metido por el culo, pero a veces ella era muy fina- Yo qué sé, ¡piensa en tus novias, Pocahontas! *-*
Tal y como le había sucedido con Paco, su concepto de "novio/a" estaba algo distorsionado. Si Pocahontas decía cuál de ellas, ella deducía que se podía tener más de uno. Tampoco le importaba. Ella tenía a Paco, pero Paco había desaparecido, así que como si no tuviese a nadie. Ni interés.

**Alastair Duncan** Vie Mayo 27, 2011 9:49 am

Mira con cara de pocos amigos el acercamiento de Erin, la prefería lejos, que al él los niños como que no...

- Yo no tengo cara de nada - gruñe, enseñando un poco los dientes, para que luego diga que no es expresivo. Jé, le ha llamado tío chungo, ahora se siente halagado y todo - Papá lo que estará seguro es encantado de perderte de vista un rato - porque él solo había visto a la chica dos veces en su vida y le sobraba una y media, así que tenerla como hija tenía que ser todo un martirio. Y obviamente, cuando amenaza con hacerle otra foto no sonríe, no, lo que hace es dejar caer la cabeza hacia un lado, sacar la lengua y poner los ojos en blanco, imitando la clásica postura de tío recién ahorcado, más expresividad imposible - ¿Salgo guapo? - deja de posar por culpa del dichoso nombrecito - Vuélveme a llamar así, peque, y te tragas la cámara. Pero literalmente, ¿eh?

**Erin A. Raskolnikova** Vie Mayo 27, 2011 9:55 am

- Para gustos están los colores -respondió con mucha calma. Se encogió cuando mencionó lo de su padre. Era posible. Ella también quería perder de vista a su padre, así que estaban en paz. Era demasiado serio como para que tuviesen la misma sangre Lo habría heredado de su madre. Esbozó una sonrisa cuando puso aquella cara, incluso se echó a reír. Seguramente Pocahontas no quería hacerle gracia, pero era fácil hacer que Erin se riese. Y por supuesto, echó la foto- ¡Bellísimo! Serás la envidia de la ciudad -ni siquiera hablaba con tono borde. Había sido tan fácil como hacer el tonto para que ella ya no le mirase con tanta desconfianza. Ladeó la cabeza y esbozó una sonrisa algo traviesa. Seguro que al final no le hacía nada - Pocahontas... ¿me cantas la de Colores en el Viento? *-*
Estaba tentándole a la suerte, y mucho. Lo sabía de sobra. Pero... en fin, el riesgo era divertido. Puede que incluso Pocahontas fuese divertido en el fondo, no en vano acababa de poner cara de ahorcado.

**Alastair Duncan** Vie Mayo 27, 2011 10:05 am

No había pretendido precisamente hacerla reír cuando puso aquella cara, sino que se mosquease o algo parecido por no querer posar, a ver si ahora iba a difundir por ahí su foto haciendo el memo.

- Ya soy la envidia de toda la ciudad - como se echase más flores iba a parecer un jardín en primavera. Duncan dinero tendrá poco, pero lo que es de ego, va sobrado. Ahora Erin no le mira con tanta reticencia como al principio, cosa que es mala, a este paso le va a perder todo el respeto - No, lo que te voy a cantar son las cuarenta - alarga el brazo con rapidez y le quita la cámara de las manos, eso por pasarse de lista - ¿Comprobamos lo fotogénica que eres? - o lo resistente que era la cámara al agua de mar, que también podía ser. Seguro que eso si que era una forma efectiva de mantenerla alejada de su persona en el futuro.

**Erin A. Raskolnikova** Vie Mayo 27, 2011 10:18 am

Miró a Pocahontas durante unos segundos, preguntándose si había alguna norma social por la que ella tuviera que inmutarse de alguna manera a eso de que ya era la envidia. Optó por la indiferencia una vez más, pero dejó de estar indiferente en cuanto le arrebataron la cámara.
- ¡No, no, eso no! ¡No quiero perder las fotos! -prefería no perder el aparato, aunque eso era reemplazable. Las fotos que había en la tarjeta de memoria no, ésas las quería. Gateó de nuevo hasta él, intentando recuperar la cámara- Vale, te dejo probarla, pero porfa... ten cuidado.
Puso pucheros, estirando las manos para coger la cámara por si le daba algún arrebato de furia que, por cierto, estaría totalmente fuera de lugar. ¿Por qué iba a estar enfadado? Ni que ella le hubiese tocado las narices

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 8:27 am

- Anda, pero si parece que tienes un punto débil – dijo burlonamente al ver el intento de la chica para recuperar su cámara, si parecía bastante preocupada y todo, que pena le daba Duncan retrocedió, sin levantarse él tampoco de la arena, y alejó el brazo con el que sostenía la cámara lejos del radio de alcance de Erin – Primera condición para que te la devuelva: jura solemnemente que no vas a volver a llamarme Pocahontas – condición que es innegociable. Mientras se piensa el resto de condiciones, lo que hace es ponerse a ver las fotos que ya había hecho, a ver si la enana era tan buena fotógrafa como aseguraba o sólo se lo tenía muy creído. No eran del todo malas, tenía que reconocerlo - ¿Así que me dejas probarla si tengo cuidado? – hizo ademán de que se le caía de las manos, aunque no la soltó en ningún momento, no era tan mala persona. Enfocó a Erin con la cámara, que ya que tenía permiso… - Venga, sonríe y di: ¡Duncan está muy bueno! – zas, foto al canto. ¿Qué? Ni que alguien a estas alturas esperase en serio que fuera a soltar algo parecido a: ¡di patata!

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 8:38 am

Se mordió en labio al darse cuenta que había demostrado que tenía un punto débil. Tenía que haberse controlado ;_; Estiró el brazo de nuevo para coger la cámara, pero desistió porque Pocahontas tenía poca pinta de querer devolvérsela:
- Bueno, vale... ¿cómo te tenía que llamar? Juraría que tenía que ver con esa peli. ¿Cómo se llama el mapache? -ella había relacionado su nombre con la peli, pero no recordaba el nombre. Ni el del individuo, ni el del mapache. Qué cosas. Suspiró y asintió, conforme con eso... y entonces relacionó conceptos. ¡Se llamaba Duncan!- ¿Te llamas Duncan? -por si acaso quiso comprobarlo. Finalmente resopló y volvió a asentir. Vaya tío, necesitaba que le alimentasen el ego constantemente- Duncan está muy bueno...
Toma flash. Se quedó unos segundos parpadeando, intentando recuperarse, y finalmente se puso en pie. Estuvo tentada a tirarle algo de arena a la cara, llena de rencor como ella sola, pero al final optó por irse de nuevo hacia el mar:
- Ahora vuelvo, cuida bien de la cámara -es que se había sentado sobre la arena con las piernas mojadas, por lo que se le había pegado toooda la arena. Y aunque tenía frío, la arena picaba un poquito. Rápidamente, a pesar de ir tiritando, entró hasta que el agua le cubrió por las rodillas, que era lo que necesitaba, y se echó a reír. En serio, el agua le hacía cosquillitas *-*

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 8:57 am

Y dale con la dichosa peli, si él no tenía ni idea de cine, su vida ya es demasiado estresante como para perder tiempo viendo películas. Traducción: pasa mucho tiempo borracho

- ¿Mapache? - frunce el ceño, algo mosqueado; a ver si le estaba comparando con un bicho de esos, ya lo que le faltaba. Asiente a lo de Duncan está muy bueno, en eso estaba completamente de acuerdo. ¡Mierda! ¿Por qué cojones le había soltado su nombre así, por las buenas? - No, que va, me llamo Terry... ¡Terry Pratchett! - no, eso no cuela, va a tener que inventarse pseudónimos propios algo más serios. Además, se está pasando de precavido, especialmente si se tiene en cuenta que el apellido Duncan se lo había puesto él mismo - Vale, si, es mi nombre, pero es un secreto de estado, no lo vayas divulgando por ahí o ... - se pasa un dedo por el cuello, a ver si pilla lo que le puede pasar si le da por irse de la lengua, pero parece que lo que es pillarlo, no lo pilla, porque le deja con la palabra en la boca y se va a darse un mini baño, y a esas horas. Decir que la mira con incredulidad es decir poco - Tu... tu no eres muy normal que se diga, ¿no? - o por lo menos era la primera vez que conocía a alguien parecido.

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 9:07 am

- ¡Leía Mundodisco de cría! -anunció cuando intentó colarle su otro nombre falso. Dio media vuelta justo donde estaba para que el agua siguiese cubriéndole hasta las rodillas y le hizo un gesto para que se acercase. Sí que pilló el gesto de "te mato si dices mi nombre", pero no le dio demasiada importancia, como a las otras amenazas que había pronunciado- Está bien... así que no puedo decir tu nombre. ¿Con qué pagarás mi silencio? -probó a bromear, aunque enseguida recordó que Duncan no parecía un tío muy dado al humor- Digo... ¿cómo tengo que llamarte delante de otras personas?
Para no cagarla, vaya, que era algo que ella solía hacer a menudo: meter la pata. Y lo peor es que no se daba cuenta. Miró al chico sin comprender su comentario. Después de todo, ¿quién definía qué era normal y qué no? Y ella desde luego tenía un concepto muy distinto de... ehm... todo.
- ¿Por qué no? -preguntó, sin disimular su incomprensión- Y explícamelo bien, ¿eh? No me digas que no soy normal y no me des motivos. ¡Y ven aquí! No quiero hablar a gritos.
Y con aquí se refería a que se metiese en el agua. Porque claro, ella lo veía muy lógico, normal y divertido. Era el mar *-*

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 9:24 am

- Tengo una noticia que seguro que te deja de piedra: eres una cría - y él no ha leído el libro ese, el nombre lo vio por casualidad en el escaparate de una tienda y le hizo gracia como sonaba. Si, tampoco es muy dado a leer libros, te distraen y te hacen olvidarte de las cosas importantes de la vida y ... vale, ya estaba bien de desvariar mentalmente, pasar tanto tiempo hablando con Erin empezaba a afectarle. Se rasca la barbilla, pensativo. No sabe que nombre decirle, pero supone que da igual, no planea tener ninguna otra conversación con la chica en el futuro - Te dejo que me llames Duncan - gruñe, total, de perdidos al río. Se puso en pie, sacudiéndose la arena de la ropa, y se acercó a la orilla para no tener que seguir dando voces, mientras meditaba la pregunta - Porque sí - ha optado por seguir picándola en lugar de darle razones concretas, que tiene más gracia - Si con lo de ven aquí quieres decir dentro del agua, ya puedes esperar sentada, ¿eh? pero tu a tu rollo.

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 9:39 am

Vale, aquello le molestó. ¿Se podía saber qué le había hecho ella para que fuese así de desagradable?
- Oh, me juzga el octogenario que ya ni tiene dientes para sonreír -refunfuñó, cruzándose de brazos. Vale, Duncan para que no le echase la bronca. Qué hombrecillo más delicado, por las bragas de Merlín. Asintió al escuchar su elaborada respuesta- Ahora has lucido tu madurez, ¿eh?
Le parecía curioso que aquel tío, que ni siquiera sonreía pero tenía ese tipo de respuestas la llamase cría a ella. Pero como Erin es muy suicida y le encanta tocar las narices, y aquel tío conseguía sacarla de sus casillas, hizo lo peor que podía hacer en aquel momento: aprovechando que él se había acercado a la orilla, lanzó una patada, salpicándole con agua de mar *-* Y se preparó para salir corriendo, ya fuese por su vida o para rescatar su cámara de todos, según lo que sucediese Very Happy

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 9:53 am

- ¿Eso es un intento de sarcasmo? - se ríe, pero esta vez sin molestarse en disimularlo, le hacía gracia cada vez que conseguía que Erin se mosquease - Parece que te he molestado un poco, no sabes cuanto.... - ...lo siento, es lo que iba a decir, pero no lo dice, es más, se calla en seco nada más recibir la salpicadura de agua. Aquí estaba la prueba de lo que decía, la chica de normal no tenía nada, porque provocarle a él así de idea buena tampoco tenía nada en absoluto, ahora iba a tener que imponer respeto, oye - Anda ven, bonita, ven aquí, que quiero hablar contigo de cerca - dice, todo agradable y simpático, como si no estuviese mosqueado en lo más mínimo; lo único que se quita antes de empezar a meterse dentro del agua, hacia donde está Erin, son los zapatos, ahora mismo le da igual empaparse toda la ropa, pero sigue llevando la cámara en la mano, que es su baza más importante.

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 9:58 am

Reparó en que aún llevaba la cámara en la mano. Empezaba a pensar que no podría salvarla. Suspiró, pero no dijo nada, se limitó a retroceder para ir más hacia lo profundo, preguntándose si él se acercaría tanto. ¿Iba a fastidiarle, hacerle una ahogadilla? Al menos que se mojase, por borde desagradable. Es más, le dirigió una mirada desafiante, retándole a entrar tan a dentro como ella, mientras no dejaba de retroceder. Vale, se estaba empapando la ropa y empezaba a helarse de frío, pero... en fin, se ha cabreado. Erin, sí, que es la persona más alegre de la Tierra... ¡pero es que era culpa de él!

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 10:06 am

Se detiene cuando el agua le cubre un poco más arriba de las rodillas, ¿de verdad va a seguirle el juego a una mocosa como Erin? Si no fuera porque supondría mandar a la mierda todas sus precauciones respecto al MIB usaría su poder para levantarla y hacer que terminara debajo del agua un par de veces, pero por muy pasota que fuera Duncan, con ciertas cosas era capaz de ser serio y todo.

- A esto me refería con lo de antes, ven aquí y hablamos como las personas normales - si Erin se acerca no piensa hablar precisamente, hasta que no acabe debajo de una ola por conseguir que terminase entrando en el mar y medio empapado, no iba a parar, decidido.

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 10:14 am

- No, no quiero -dijo con firmeza- Yo no seré normal, pero tú tampoco. No tienes ni una pizca de humor, ni de solidaridad, ni de encanto. Eso sí, eres bastante predecible, porque quieres putearme, así que o tirarás la cámara al agua o me harás una ahogadilla, o ambas cosas. Por cierto, ¡muy maduro! -por llamarle cría- Sobre todo teniendo en cuenta que me sacas dos cabezas.
Era algo observadora cuando quería. Si Duncan quería que ella acabase empapada, ella tenía claro que lo conseguiría. Por eso de sacarle dos cabezas. Por eso, guardando cierta distancia, y por orgullo y por si acaso, antes de que lo hiciese él, se sumergió ella solita y emergió totalmente empapada. Ahora sí, caminó hasta él, sin dejar de tiritar, pero con mirada segura. Aunque estaba cagadita. El tío era capaz de ser un bruto y soltarle una bofetada. ¡Y pensar que por un momento pensó que podría caerle bien!

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 10:28 am

- Oye! - protesta cuando la chica le suelta un discurso que parece encargado de Predicadores A Domicilio, S. A. Además, no tiene ninguna base, él tiene mucho sentido del humor. Y de encanto va sobrado. De la solidaridad pasa olímpicamente, eso no va con él. De todas formas le molesta que le llame predecible y que haya leído sus intenciones con tanta claridad, pero sobre todo le molesta que no deje de tener cierta razón, él tampoco estaba siendo el paradigma de la madurez. Observa como Erin se sumerge ella solita en el mar y como camina hasta llegar a su lado. Jé, que decisión más mala; Duncan posó una mano sobre la cabeza de Erin.... y se limitó a darle un par de palmaditdas.

- ¿Ves como de normal no tienes nada? No te pareces en nada al resto de las chicas de diecisiete años. Ni de dieciseis, ni de diecinueve, ni ninguna que conozca - es decir, que está loca. Retira la mano de su cabeza y le alarga la cámara de fotos, no había pensado en serio tirarla al agua - Sal fuera, vas a terminar azul y con un resfriado de caballo - lo que es él, se limita a girarse y a salir del agua, sin molestarse en comprobar si Erin le sigue o no, no es su padre.

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 10:37 am

Arrugó la nariz al notar los golpecitos en la nariz, pero esta vez creyó conveniente no decir nada y no tentar más a la suerte. Cogió la cámara con cuidado y echó a andar tras él para salir del agua con cuidado, procurando que la cámara no se mojase demasiado. Caminó de puntillas, para no llenarse de arena hasta su bolso, donde guardó la cámara para que estuviese sana y salva. Luego se giró hacia Duncan y le estampó un beso en la mejilla, mojándole un poco, pero esta vez sin querer:
- Gracias por devolverme la cámara -para que luego dijera que no era agradecida o que era maleducada. Que bien podía haberle roto la cámara contra la cabeza. Luego, sin dejar de tiritar, se echó el bolso al hombro. Debería irse a casa, era tarde- ¡Ñah, has conseguido que me ponga seria! -refunfuñó, enterrando uno de sus pies bajo la arena.

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 10:47 am

Genial, está empapado No hace mucho frio, de acuerdo, pero la sensación de ir andando chorreando agua y practicamente calado por completo no es nada agradable. Va a darse la vuelta, arrepentido de no haberse vengado como había planeado en un principio, por muy predecible que quedase, pero Erin ya ha salido fuera y le planta un beso en la mejilla. ¿Holaa? ¿Y esto a qué venía? Retrocede un poco, ligeramente sorprendido. No es la primera vez que le besan, faltaría más, pero nunca un beso tan inocente, sólo por agradecimiento.

- De nada. Pero acuérdate de no volver a llamarme Pocahontas o la cámara y tu terminareis en el fondo del mar, para que os hagais compañía - y como Erin vuelve a tener razón y el momento se está volviendo algo serio por minutos, ahora es él quien da una patada suavecita a la arena, para que se quede pegada a las piernas mojadas de la chica. Eso si que no había siedo predecible, queno le toque las narices

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 10:54 am

- ¿Ni siquiera cuando quiera picarte? -¿qué pasa, que no le picaban nunca o qué? - De todas formas, me gusta más Duncan que... ¿Jack Sparrow era? Bah, lo que fuese -no recordaba su nombre falso. Al ver que le manchaba de arena, enarcó una ceja y le miró. Aquello era un reto en toda regla- ¡Veamos si eres tan duro como pareces!
E intentó hacerle cosquillas. Ella cogía confianza para esas chorradas con mucha facilidad, y contaba con que Duncan no iba a darle ya ni una colleja a esas alturas. Le encantaría rebozarle con arena, pero no iba a lanzarle puñados ni tenía fuerza para tirarle al suelo. Así que las cosquillas eran su única opción de echarse unas risas en cualquier momento, y a ver si de paso entraba en calor

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 11:05 am

- Tu no quieres picarme, "peque", tu no quieres que me mosquee contigo nada en absoluto - la corrige, pero no puede evitar una mueca que se parece sospechosamente a un asomo de sonrisa. Joder, era imposible estar mosqueado mucho tiempo con ella, o al menos eso piensa durante un par de segundos, hasta que vuelve a quedársela mirando con cara de pasmo cuando intenta hacerle algo parecido a cosquillas, es que no le tenía ningún respeto - No aprendes nunca, ¿verdad? - pregunta, y para que se esté quita de una vez la rodea por la cintura y la levanta en el aire. Jé, si pesaba lo mismo que un renacuajo, podría sostenerla todo el día sin cansarse. Duncan se plantea dejarla caer al suelo y que acabase de arena hasta arriba, sí, no sería muy maduro, pero ya había perdido toda la madurez de reserva aquel día, por hacer el tonto un rato más...

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 11:12 am

- ¿Por qué no? ¿Ruges a lo Mufasa? ¿Sabes hacer artes marciales? -ella se lo tomaba todo mucho con humor, ejé. Así que prosiguió intentando lo de las cosquillas, incluso le clavó un poquito un dedo en el costado. ¡Nada!- ¿Pero tú te ríes alguna vez? -es que esa parte empezaba a ser frustrante. En cuanto la levantó, ella también se imaginó a sí misma cayendo al suelo y rebozándose en la arena, por lo que sin dudarlo ni dos veces, se enganchó a él con piernas y brazos Si quería tirarla al suelo, tendría que tirarse él también. ¡Ajá!- Bueno King Kong, ¿ahora vas a escalar el chiringuito de los helados y a matar unos cuantos mosquitos?
Jé, jé, jé, ella no se cansaba de hacer comparaciones chistosas. Entornó los ojos, mirándole fijamente ahora que le tenía bien cerca, e incluso acercó su cara a la suya, acabando un poquito bizca sin querer. Ahora que se fijaba, tenía ojos de simpático. ¡Pero no se reía! Qué misterio. Se quedó así, mirándole de cerca, sin decir nada y con cara de concentración.

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 11:21 am

- Se hacer cosas mucho peores, ninguna de las cuales le interesa saber a una criaja que debería estar en su casa durmiendo hace varias horas - y Erin se agarra a él como una lapa; o era un intento de asfixiarle bastante patético, o se había olido que pensaba rebozarla en arena y había tomado medidas para evitarlo, cosa que no le gusta, odia que le llamen predecible - Si que me río, ahora mismo me estoy riendo, mira: - y enseña los dientes en algo que de sonrisa no tiene ni el nombre. Si no la puede tirar a la arena, ya que sigue empapado se meterá en el agua con ella en brazos, a ver quien aguanta más la respiración. Da un par de pasitos hacia el agua, al menos hasta que Erin se le queda mirando fijamente con aire solemne - ¿Qué? ¿Tengo monos en la cara? - mírala que mona cuando está tranquila, si hasta parece buena y todo

**Erin A. Raskolnikova** Dom Mayo 29, 2011 11:31 am

- ¿Pero te piensas que nací ayer? Sé ciertas cosas -alardeó, aunque en realidad no sabía gran cosa. Vale, sabía que los bebés no venían de las cigüeñas ni de París y que la gente era cruel y eso... pero lo de la gente cruel ella lo imaginaba en otra dimensión, por eso ella era "simpática" con todo el mundo. Ladeó la cabeza un poquito cuando dijo que aquello era una sonrisa, y soltándose sólo de un brazo, lo llevó a su cara y tiró suavecito de su mejilla a ver si conseguía una sonrisa decente- Venga, hombre, que no es tan difícil. ¿Es que eres inválido de cara? Pobrecito... -se lamentó con toda sinceridad, porque no se estaba metiendo con él, no señor Negó con la cabeza, con mucha seriedad- No, es que... verás... bah, da igual.
No se lo iba a decir, que seguro que lo negaba y era capaz de ir corriendo a operarse los ojos (?) Volvió a engancharse con firmeza y esperó a que él hiciese algo. Claro que era un soso... tal vez necesitase sugerencias:
- ¡Salta una ola! Una por lo menos, ¡porfi!

**Alastair Duncan** Dom Mayo 29, 2011 11:45 am

- Qué vas tu a saber - si, la está vacilando, para variar - Seguro que sabes que dos más dos son cuatroy el precio de las piruletas de la tienda de la esquina de tu casa - se queda tan pancho tras soltar eso, y lo siguiente que hace para premiar tantas confianzas como se está tomando Erin es hacer amago de soltarle un mordisco en la mano cuando estira de su mejilla. La siguente vez va en serio - No, ahora me lo explicas - que le ha dejado con la curiosidad, que se lo aclare. Sigue dando pasos cortos hacia la orilla, hasta que la niña parece predecir otra vez sus intenciones. Duncan se mosquea, pues qué bien, ni el factor sorpresa podía tener - ¿Qué salte? ¿Por quien me has tomado, por tu canguro particular? - coño, que salte olas con sus padres, como hacen todos los niños medianamente normales. Venga, hará un último intento de no ser predecible: sin soltar a Erin, que ya empezaba a pesar un poco, se mete en el mar hasta la cintura y ... zas, los dos debajo del agua, de saltar olas nada

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