Casa Malkovich

Se ríe cuando pone esa cara de rancio, ay, si es que con decir las palabras mágicas consigue lo que quiere con tal de no parecer débil a su lado, debe admitir que a ella en muchas ocasiones le ocurre lo mismo así que no es nadie para decir nada. En cuanto ha subido sonríe y con una mano le tapa los ojos mientras que coloca un dedo de la otra sobre sus labios, indicándole que guarde silencio. Retira las manos y:

- Tachán –se sube al tejado porque desde allí tiene vistas de toda la ciudad, es relajante y agradable para pensar, así por lo menos no están bajo- abre la boca.

- ¿Cómo que qué? –Dice alzando las cejas- ¡Pocas personas tienen el honor de subir al tejado de los Malkovich a ver las vistas! –O sea ella y... una vez subió a Scott, claro que su padre no aprueba que nadie suba allí, se escandalizaría por lo que pudiera pasar. De todas formas, aunque haya soltado ese “que” tan borde se ha dado cuenta de que el chico se ha quedado mirando las vistas. Toma, para que luego diga.- Para una cosa, venga, te prometo que no es nada malo, no te pienso meter un puñado de tierra –porque por allí no hay, que si no...

Decide dejar el tema porque debería saber cómo es Virgil y en realidad todo ello no le sorprende lo más mínimo, además, puede que acabe intentando tirarle por el tejado. El intentaría lo mismo y acabarían cayendo los dos. Tiene demasiado que perder. Espera a que por fin obedezca y cuando lo hace esboza una media sonrisa, saca la pisolita naranja del bolsillo y se la acerca a la boca del chico, lo suficiente como para poder disparar y que el líquido caiga en su boca, espera que la cierre al instante. Se ríe por lo bajo, normalmente suele tenerla cargada de agua, excepcionalmente de vodka, como aquel día. Nunca ha visto a Virgil bebiendo, aun recuerda cuando en la cutre taberna se pidió agua, se pregunta qué hará.

Esta vez intenta no reírse por no soportar su cara de perro, pero es que su cara ha sido muy buena, sobre todo porque no se lo esperaba, si es que las sorpresas a veces son buenas, en este caso para ella mejor que para él, pero no va a decirlo, claro. Se encoge de hombros y ahora es ella la que se apunta con la pistolita y aprieta. Cierra los ojos al tragar notando como le quema la bebida al bajar por su garganta.

- ¡Es una fiesta! –Empieza a reírse y flexiona las rodillas par ajuntarlas al pecho y rodeárselas con un brazo- ¿un poco más?

Ya, no tiene sentido peor mira como abre la boca pidiendo más vodka, si es que Virgil es todo un borrachín aunque no lo admita, seguro que en su casa abres un libro y es hueco, tiene botellas guardadas, ya irá un día a espiar y a continuar con su búsqueda del tesoro, que ha avanzado en la lectura de la libretita. Acerca la pistola y aprieta para que caiga el chorrito y como es para él y para ella, ¡otro traguito! Viva la felicidad.

- Bueno, ¿a qué has venido? –Pregunta finalmente, tiene curiosidad y supone que a verla a ella no, Virgil no es tan social como para eso. Te pide que te quedes en su casa, pero no va a verte.

Le hace gracia que siga con lo de que ha venido a ver a una amiga, más que nada porque no sabe si la considera una amiga o qué coño la considera, de cualquier forma espera a que añada más y ¡bingo! Ahí están las palabras que esperaba escuchar, aunque si que es cierto que prefería que fuera al grano directamente.

- Pues tú dirás –que pida y después ella verá que hace y si acepta sus condiciones, aunque como ahora al parecer son amigos le costará más negarse. Al ver como extiende la mano deja la pistolita sobre ella, pero no tarda en abrir la boca: quiere más. Y no va borracha, tiene más aguante que Virgil el chico que solo bebe agua, ¿no ves que él hace milenios que no bebe? A ver si se va a caer.

Cierra los ojos cuando ve que se acerca y deja que dispare, no una, sino dos veces. Saborea antes de tragar notando como le quema la garganta y después abre los ojos de golpe. Le mira para escucharle porque lo que esta diciéndole le sorprende y eso que le cuesta centrarse un poco, aun estaba pensando en el vodka. Abre los ojos, ¿Qué vuelva al MIB? ¿Por qué tiene esa necesidad? SI ya le dijo que apenas lo echaba de menos. Y lo que más le sorprende es que le pide que lleve a otra persona, ¿a quién? Eso no le va a costar mucho, más que nada porque aun sigue teniendo acceso a todas –o casi todas- las instalaciones.

- ¿A quién y para qué?

A una amiga... vaya, así que tiene más amigos, se pregunta a que llama Virgil amigos. Le escucha y asiente con la cabeza cuando hace esa pregunta, vaya, así que por fin ha llegado el momento, tiene ganas de preguntar más cosas pero sabe que si le va a contar algo será porque él quiere y entonces lo hará poco a poco y sin que le presione.

- Vale, esta bien –concede- cuando tu amiga quiera. –Y sin más abre la boca, indicándole que quiere más vodka. Ya se encargará ella de que su padre no vaya ese día a trabajar y fin, no tendrá porque la mentar perdidas.

Asiente con la cabeza sin ganas de dejar ya el tema, que están en el tejado y allí no se habla de esas cosas, es la nueva norma que ha impuesto. Disfruta del último trago de vodka y se mueve, para acercarse a la ventana y salir del tejado, que ya refresca.

- Pues habrá que bajar a por más, que tu apenas has bebido –En realidad no va a bajar a por eso, pero él que lo piense, así luego le sorprenderá. Le hace un gesto para que la siga y camina por la buhardilla hasta la escalera y empieza a bajar.

La verdad es que sí que le esta paseando por toda la casa, pero es que olvida que Virgil no está para tantos trotes. Gruñe un poco cuando le dice que no va a beber más y baja las escaleras con tranquilidad, para darle tiempo a que la siga. Cuando finalmente llega bajo del todo espera a que lo haga él y tira de su mano para que se acerque y poder besarle, mientras camina de espaldas hacia su dormitorio.

La verdad es que no dudaba que fuera a corresponder al beso, al fin y al cabo sabía lo que iba a pasar porque en pocas palabras se lo ha dicho antes. De todas formas se ha dado cuenta de que le ha pillado por sorpresa, si es que lo del alcohol le ha despistado. Camina con él hacia el dormitorio y al llegar a este cierra la puerta tras ellos y pasa lo que tiene que pasar